Pronto en Espacio Hudson: “Tus huesos son mis huesos”, la resistencia ancestral de la mujer septiembre 12, 2023 – Publicado en: Entrevistas
Por Santiago Rosa
El abordaje del conocimiento de la cultura de los pueblos originarios implica para los especialistas un terreno no exento de controversias, que van desde el rigor y la seriedad, con el que asume la tarea, hasta el posicionamiento ideológico que de esto se desprende.
Aunque no puede exigírsele a la narrativa de ficción la utilización de los mismos parámetros, la función del escritor, en este caso no mapuche, representa todo un desafío, más que nada en términos de compromiso y coherencia con la perspectiva del relato histórico.
Beatriz Rosón es oriunda de la provincia de Buenos Aires, estudió la carrera de Letras y en 1988 llegó a la ciudad de Neuquén por motivos de trabajo, enamorándose por completo de la ciudad. Fue profesora lengua y literatura en los niveles secundario y terciario hasta jubilarse en 2017 para dedicarse con más tiempo a una de sus mayores pasiones: la escritura.
En su último libro, Beatriz aborda el género de la novela histórica. Ambientada en el siglo XIX, la historia comienza con la derrota del Cacique Calfucurá en la batalla de San Carlos, y se extiende hasta la avanzada del General Julio A. Roca. Sin embargo, esos datos históricos dan contexto a una narración centrada en la protagonista: una machi, que comprende que deben preservar su sabiduría ante la invasión huinca, y decide viajar al sur, donde se encontrará con una aprendiz. Así, la novela desarrolla el tema central del conocimiento que tenían las machis y cómo accedían a ese aprendizaje.
Beatriz Rosón.
El término “Machi” se aplica como femenino porque son las mujeres las que cumplen con esta función sagrada de intermediarias entre el mundo terrenal y sobrenatural, utilizándose además en singular por las características particulares que asume esta expresión dentro del sistema de creencias del pueblo mapuche. Dentro de las comunidades, las “Machi” son las encargadas de velar por la salud de sus integrantes, en virtud de los poderes que los espíritus protectores les otorgan para doblegar las fuerzas nocivas o amenazantes.
En el libro Tus huesos son mis huesos, la autora se sitúa desde el punto de vista de los pueblos originarios y además emprender una exploración exhaustiva de la lengua del pueblo mapuche, reflejada en la profusa utilización, del vocabulario del mapuzudun a lo largo de la misma, lo que le permitió construir una estructura muy consistente para el desarrollo del relato. En diálogo con LM Neuquén, Beatriz Rosón explicó que el título responde a la cosmovisión de los pueblos originarios, que se sentían en unidad y sobre todo en unidad con la tierra.
«La novela es sobre Katsu, una machi, que tiene en un momento avanzado de la historia, una aprendiz. Cuando se encuentran, Katsu le dice a Cengehech “Tus huesos son mis huesos”, una forma metafórica de expresar que le dejará todo su conocimiento como herencia, y en Cengehech vivirá Katsu, una vez que ella parta a brillar en el cielo», agregó.
– ¿Cómo fue escribir Tus huesos son mis huesos?
El proceso fue muy interesante. Investigaba y escribía, proceso que duró 11 años, ya que quise que toda la novela estuviera narrada desde el punto de vista de los pueblos originarios. Cada “tirón” de escritura me llevaba a volver a la investigación. Incluí palabras del vocabulario mapuche, de los tehuelches del norte y del sur, y puelche, porque el lenguaje es el cuerpo de la literatura, y para trasladar a los lectores, las lectoras a ese tiempo y cosmogonía, necesitaba usar esos vocabularios. Hay aclaraciones después de cada palabra, para hacer la lectura más fluida, y un glosario al final.
-¿En qué fuentes fundamentaste tu obra?
Mi libro de cabecera fue Nuestros paisanos los indios, del antropólogo Carlos Martínez Sarasola. Leí toda la bibliografía disponible en la Biblioteca de la Universidad Nacional de la Plata, donde residía cuando empecé a escribir la novela. Pero enumerar todas las fuentes escritas excede esta entrevista, ya que los libros ocupan casi todo un estante de una de mis bibliotecas. También abrevé en la web y en fuentes orales, que son citadas en los agradecimientos, al comienzo de la novela. A modo de información, en los anexos cito los libros más importantes con vocabulario.
– ¿Tuviste alguna resistencia de parte de alguien por la elección de un tema tan polémico?
No, la verdad que no. Fue un trabajo silencioso, y por fortuna, las mapuches con quienes me contacté se mostraron muy dispuestas a brindarme información. En los agradecimientos, destaco la ayuda de Cristina Pérez, de apellido original Añigual, quien estuvo dispuesta a leer mientras iba escribiendo, corregirme errores y darme información nueva con mucha generosidad.
– ¿Cuál es tu relación personal con el tema de los pueblos originarios?
Es muy estrecha. Entiendo que toda esta tierra era de ellos, que fue usurpada. De hecho, la campaña de Roca se financió a cambio de miles de hectáreas que luego de desalojados los pueblos originarios, se repartieron entre unos pocos nombres. Eso explica la cantidad de estancias en la Patagonia. Por otra parte, la forma en que fueron expulsados de la tierra en el sur fue muy cruenta, algo que narro en la novela. Es imposible no sentir empatía por los sobrevivientes.
– ¿Cómo se configura la presencia de la mujer dentro de la cosmogonía mapuche y como la reflejás en el libro?
Según mis fuentes orales, los mapuches eran matriarcales, hasta la llegada de los españoles, que en los mestizajes y encuentros fueron transformando la cultura en patriarcal. En la novela hay dos chamanes varones (algo común en el pasado), pero Katsu es la protagonista principal.
– ¿Cómo es publicar un libro en Neuquén hoy?
Es difícil por el costo del papel. También me resultó difícil que alguna editorial se interesara por el tema de la novela, hasta que encontré buena recepción en la editorial Espacio Hudson, que tiene un sistema de preventa a menor costo, con el que se autofinancia en parte la edición.
– ¿Cuáles son tus próximos proyectos?
Buscando bibliografía para esta novela, di en Esquel con el libro Mujeres indígenas de Pampa y Patagonia, de Norma Sosa, una reseña histórica de unas cuantas machis, caciquejas, princesas, mujeres de caciques, lenguarazas, etc. Me propuse ficcionar la información histórica, transformándola en cuentos. Tengo dos escritos, hasta ahora. Otro proyecto totalmente distinto es un libro de poesía religiosa, para el cual he escrito por ahora unos diez poemas. El tiempo dirá por dónde me lleva la imaginación y las búsquedas.
Entre sus publicaciones se encuentran los libros: Tiempo, poemario de 2011, publicado por la Fundación Tribu Salvaje; Grietas, poemario de 2017, publicado por Ediciones del Dock y Bosquejos sobre García Lorca, publicado en 2021 en forma de plaqueta, por La cebolla de vidrio. También ha publicado cuentos en antologías de las provincias de Córdoba, Río Negro, Buenos Aires y en la ciudad de Madrid. Los interesados en la obra de Beatriz Rosón pueden además consultar el blog de cuentos: https://beatrizroson.blogspot.com/
Fuente: lmneuquén